El riesgo país argentino volvió a marcar un récord positivo este lunes al tocar los 596 puntos básicos, su nivel más bajo en diez meses, desde enero de 2025. El indicador que elabora JP Morgan retrocedió 40 puntos desde el viernes y acumula una baja del 8,2% en lo que va de noviembre, reflejando una mejora en la percepción del mercado sobre la economía argentina.

Pasado el mediodía, el índice volvió a ubicarse levemente por encima de esa marca, en 603 puntos, pero mantuvo la tendencia a la baja. Para encontrar un valor similar, hay que remontarse al 14 de enero pasado, cuando el riesgo país se situaba en 580 puntos básicos.

Bonos en alza y confianza del mercado

El optimismo de los inversores responde a las expectativas de acceso a financiamiento internacional, impulsadas por un posible préstamo de grandes bancos de Wall Street, la colocación de deuda externa y el anuncio del Gobierno sobre la recompra de bonos soberanos.

En este contexto, los bonos argentinos en el exterior iniciaron la semana con subas superiores al 2%, mientras que las acciones de empresas nacionales que cotizan en Wall Street también mostraron fuertes incrementos:

Telecom Argentina: +4,8%

YPF: +3,1%

Edenor: +2,5%

Loma Negra: +2,4%

Qué pasa con el dólar

En el mercado cambiario, el dólar oficial se vende a $1445 en las pantallas del Banco Nación, mientras que el dólar blue cotiza a $1425. En tanto, el dólar MEP opera a $1452 y el contado con liquidación (CCL) se ubica en $1475.

El ministro de Economía, Luis Caputo, ratificó que se mantendrán las bandas cambiarias —con un tope de $1500,99— y confirmó que el Gobierno seguirá adelante con la recompra de deuda y la acumulación de reservas internacionales. Sin embargo, el desafío sigue siendo cumplir con la meta del FMI, que exige al Banco Central sumar unos U$S9000 millones antes de fin de año.

Un nuevo piso para el riesgo país

El descenso del riesgo país, que se redujo a la mitad desde las elecciones legislativas, abre una ventana de financiamiento externo para la Argentina a tasas más competitivas. El dato es clave para los analistas, que ven en esta tendencia una señal de confianza renovada en la política económica y en la estabilidad financiera del país.